'Año nuevo, vida nueva'

Año nuevo, vida nueva 

(¡Qué tópico más sano!) 

Nueva luz ilumina 

mi ascensor apagado 

de subir a deshora, 

de estar comunicando, 

de hacer la angustia en verso, 

de hacer el tonto en vano, 

de sembrar mis insomnios 

de tachuelas y clavos.

Año Nuevo, Gloria Fuertes.

Con el año nuevo que empieza hacemos propósito de iniciar una ‘vida nueva’ que imaginamos llena de nuevos proyectos, nuevas experiencias, nuevos objetivos y nuevas metas. Muchas veces nos proponemos, al comenzar un nuevo año, realizar tareas que luego no hemos podido completar y que nos acaban dejando insatisfechos.

Para ello, lo mejor es seguir estos consejos:

• Elige solo un propósito de tu lista; obtendrás mejores resultados si te enfocas.
• Divide tu propósito en metas y ponle plazo a cada una.
• Elige algo que realmente quieras hacer y no algo trendy.
• Cuéntale tu propósito a tu familia y amigos, la presión social te ayudará.
• Recompénsate por los pequeños logros que alcances.
• Es casi seguro que fallarás más de una vez pero NO TE RINDAS, tú puedes conseguirlo.

Pero, aún así, yo creo que la mejor ‘vida nueva’ es nuestra vida antigua, quitándole los errores que nuestra soberbia nos ha creado, los muchos errores que arrastramos y de los que, sin embargo, no nos queremos desprender. 

Hay pocas cosas tan reparadoras y bonitas como la repetición de las cosas sencillas; porque es precisamente en la repetición (mucho más que en la búsqueda de novedades) donde uno descubre que la única vida nueva es la vida con un estribillo, la vida recorrida de ritos que se repiten y nos permiten reparar en la belleza de nuestros días. En cambio, la vida obsesionada por la novedad acaba siendo siempre una vida sin eje ni horizonte, una vida urgente y resbaladiza, vida de polilla que persigue todas las modas y acaba hundida en la frustración.

Volvamos la vista atrás, recuperemos nuestras huellas, volvamos a andar el camino despojados de los viejos errores. Y tal vez así logremos vivir una ‘vida nueva’.